Blas "el chispero", ciego, mendigo y contador de historias asiste con su guía, un pilluelo de nombre Angel de Dios y al que insiste en llamar Lazarillo, a la inauguración del canal de Isabel II.
El joven pícaro no avisa al ciego de que la reina está cerca escuchando y puede ofenderla con sus comentarios, que es lo que de hecho sucede. Para intentar librarse del inminente castigo comienza a contar la historia de Pepa Montes, aguadora en el Madrid de la ocupación napoleónica, y Jean-Lois Michel, un capitán de húsares haitiano, mulato y magistral espadachín.
Dicha historia comienza una noche en la taberna del Mediodía. Allí se desata una reyerta entre el priemer regimiento (compuesto por italianos) y el trigésimo segundo (integrado por franceses) de la tercera división del ejército de Bonaparte.
Para calmar los ánimos y que acaben los incidentes entre ambos regimientos que se vienen sucediendo desde la pelea en la taberna, el coronel francés y el italiano acuerdan celebrar un duelo entre los 30 mejores espadachines, 15 de cada regimiento.
Se enfrentarán un francés y un italiano hasta que uno de los dos muera o caiga incapaz de levantarse y continuar la pelea. El vencedor tendrá dos minutos de para reponerse y se enfrentará al siguiente espadachín del regimiento rival.
Cuando no quede nadie vivo o en condiciones de empuñar el sable en uno de los dos equipos el otro será declarado vencedor del duelo y se dará por zanjada la disputa entre el trigésimo segundo y el primer regimiento.
Se enfrentarán un francés y un italiano hasta que uno de los dos muera o caiga incapaz de levantarse y continuar la pelea. El vencedor tendrá dos minutos de para reponerse y se enfrentará al siguiente espadachín del regimiento rival.
Cuando no quede nadie vivo o en condiciones de empuñar el sable en uno de los dos equipos el otro será declarado vencedor del duelo y se dará por zanjada la disputa entre el trigésimo segundo y el primer regimiento.
El capitán Michel es el primer francés en batirse contra los italianos y debe continuar luchando mientras no sea herido o muerto con un pequeño descanso entre un combate y el siguiente.
Pepa Montes, salvada por la intervención de Jean-Louis de una violación y posiblemente su posterior asesinato a manos de dos soldados franceses borrachos, se acerca durante el duelo a ofrecerle agua de su cántaro y a darle ánimos.
El husar haitiano, de complexion menos robusta que sus adversarios y sus propios compañeros de equipo, es en un primer momento subestimado, pero poco a poco todos se dan cuenta de su gran habilidad y su valor despertando la admiración de los espectadores y ganándose su favor.
Durante el duelo se descubrirá una traición, se resolverá un asesinato y habrá que rescatar a Pepa de las garras del sádico y despreciable capitán Feraud, enemigo jurado del capitán Michel.
Me he tropezado con una pequeña joya casi sin querer y solo porque me
gustaron el título y la portada. Un título atractivo y que hace referencia al momento culminante de la historia y una acertada portada, sobria y discreta como el capitán Michel.
Al principio del libro me llevé un buen susto. Un ciego y un pilluelo al que se empeña en llamar Lázarillo llenan las primeras páginas con un castellano antiguo. Ningún problema con el castellano antiguo, lo peor que puede pasar es tener que buscar en el diccionario alguna palabrilla como "currutaco". Pero con el "Lazarillo de Tormes" no puedo. No me gusta la picaresca en general y esa obra en particular me aterra.
Por suerte fué un susto corto de pocas páginas. El castellano se vuelve pronto mucho más asequible aunque conserva el aire antiguo y el ciego y su lazarillo ceden rápidamente el protagonismo al husar y la aguadora.
La novela tiene durante toda la narración ese tono de "romance de ciego" y aunque gran parte de la trama corresponde a los sucesivos combates que mantiene el capitán Michel con los italinos pero en ningún momento decae el interés por la historia.
Si tengo en cuenta un extenso número de páginas de esta historia está llena de términos de esgrima y descripciónes de peleas con sable y que yo soy profana en la materia resulta clara la calidad del texto que me ha mantenido adherida a él hasta el punto final.
Si tengo en cuenta un extenso número de páginas de esta historia está llena de términos de esgrima y descripciónes de peleas con sable y que yo soy profana en la materia resulta clara la calidad del texto que me ha mantenido adherida a él hasta el punto final.
Durante el curso de la narración el autor desarrolla temas como el racismo y el desprecio a quienes son considerados seres inferiores por su raza o la clase social a la que pertenecen. Los malos tratos infligidos por el ejercito ocupante a las gentes del país que ocupan y el odio que eso genera. Hay reflexiones sobre el desencanto con los ideales de la Revolución Francesa que han quedado en papel mojado, sobre la esclavitud y sobre el honor.
Al final el libro plantea el símil entre el origen de una guerra y de un duelo, ambos difíciles de discernir. Los contendientes continuan por inercia hasta el final aunque ya no recuerden en que momento y porqué empezó todo ni tengan claro como acabar.
En fín que me queda un estupendo sabor de boca tras terminar "La estocada secreta" de Victor Almazán.
Sobre el Autor
Victor Almazán nace en Madrid en 1974. Prueba suerte con la música en varios grupos, tras su escaso éxito abandona. Es Licenciado en Ciencias de la Información y autor de varios guiones de largometraje. Trabaja en televisión como guionista para series como "El Inquilino" y programas como "El Club de Flo", "Se lo que hicisteis la última semana", "El rey de la comedia" y "Al ataque". Es autor también del libro "La venganza de las cajas" ganador del XVII Premio Jaén de Literatura Juvenil en 2011.
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